El Parque Nacional del Manu es uno de los lugares más extraordinarios y conocidos del mundo por tener la mayor diversidad biológica de todo el planeta ubicado en el departamento de Madre de Dios. A su vez, está reconocido por la UNESCO como Patrimonio Mundial de la Humanidad y Reserva de Biósfera[1]. 

El pasado 06 de Noviembre del presente año, el Ministerio del Ambiente y el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (SERNANP) expresó su total rechazo al proyecto de Ley N° 2320/2012[2]; pues este propone declarar, de necesidad pública y de interés nacional, la construcción de la carretera de integración de Madre de Dios, tramo denominado: Nuevo Edén-Boca Manu-Boca Colorado[3] . 

"...Uno de los lugares más extraordinarios y conocidos del mundo por tener la mayor diversidad biológica de todo el planeta."

Es importante mencionar que este proyecto de ley, ingresó el 5 de Junio del 2013 al Área de Documentación del Congreso de la República. Fue derivado a la Comisión de Transportes y Comunicaciones el 13 de Junio del mismo año; la misma que recomendó la aprobación del proyecto a pesar de que ya por ese entonces, tanto el MINAM y el SERNANP mostraban su disconformidad con el mismo[4] . Según estos dos últimos, dicha iniciativa parlamentaria “vulneraría los objetivos de creación del Parque Nacional del Manu y la Reserva Comunal Amarakaeri”[5] . 

Por otro lado, la Reserva Comunal Amarakaeri posee una gran variedad de ecosistemas y microclimas que brindan refugio a un enorme número de especies de fauna y flora, muchas de ellas en situación amenazada[6] . Asimismo, alberga pueblos indígenas en aislamiento voluntario.

Ahora, como hemos explicado en líneas anteriores, el proyecto de ley al que hacemos mención fue dado a conocer al Congreso en Junio de 2013. Sin embargo, y a pesar de haber transcurrido más de dos años desde su conocimiento, recién el 5 de Noviembre de este año fue aprobado por el Congreso de la República[7]. Es por ello que Pedro Gamboa, jefe del SERNANP, hace unos días afirmó lo siguiente:

"Nos hemos dado con la sorpresa que un proyecto que estaba archivado por casi dos años se haya retomado y haya sido aprobado, creo que ha sido un desconocimiento de la realidad. Es más, esta carretera ha merecido una denuncia ante la Fiscalía y esta ha aperturado una investigación preliminar contra el gobernador regional y las autoridades involucradas"[8] .

En esa línea, el 9 de Noviembre, Pedro Gamboa -en conjunto con el MINAM- denunció la construcción de carreteras ilegales en zonas de amortiguamiento de áreas protegidas en Madre de Dios; además, indicando que dicha carretera “está siendo utilizada para transportar combustible y evitar el control que se hace por la carretera Interoceánica”[9] . Este hecho motivó la denuncia -por parte del SERNANP- contra el gobernador regional de Madre de Dios. Como consecuencia de ello, se inició la apertura de la investigación preliminar por parte de la Fiscalía Provincial en Materia Ambiental del Cuzco[10] .

Ahora, la carretera a la que el jefe del SERNANP hace mención, comenzó a construirse por orden del gobernador de la región de Madre de Dios, Luis Otzuka Salazar; el gerente de la subregión Manu, Reynaldo Rivas Dávila; y el subgerente de Infraestructura de la subregión Manu, Daniel Limachi Huallpa[11] .

De esta manera, el Gobierno Regional, estaba expandiendo una serie de carreteras de forma ilegal; debido a que no cuenta ni con las autorizaciones ni con los estudios requeridos, ello muy a pesar de estar usando fondos públicos. Frente a ello, nos queda preguntarnos:

¿Realmente la construcción de estas carreteras responde a demandas de la población local o si el objetivo, en realidad, es el de abrir nuevas áreas para la minería informal y para la extracción de madera sumamente valiosa?[12] .

Adicionalmente, como indica César Gamboa, representante de la Asociación Civil “Derecho, Ambiente y Recursos Naturales” (DAR), cuando se construye una carretera existe un impacto indirecto. Generalmente, la primera idea de la población local es que con la creación de una carretera se va a tener un rápido y mayor acceso a ciertos bienes y servicios[13]. Sin embargo, construir una carretera implica más que ello.

Al construir la carretera Nuevo Edén-Shipetiari, se están amenazando –como hemos indicado anteriormente- las áreas protegidas de Madre de Dios. Esto se produce al fragmentar la zona de amortiguamiento del Parque Nacional del Manu. Asimismo, se afecta tanto el territorio tradicional de los Mashco-Piro (un pueblo en aislamiento voluntario) como la Reserva Comunal Amarakaeri[14] .

Otro aspecto importante, es el hecho de que con este tipo de proyectos en la Amazonía, se generan impactos ambientales y sociales demasiado altos; puesto que se hace mucho más fácil transportar bienes y personal a determinadas áreas del bosque primario con el objetivo de hacer actividades ilícitas, desde el narcotráfico –pasando por la tala informal- hasta la minería ilegal[15]. No obstante, no solamente se está afectando al ecosistema y a la sociedad, sino que se está contrariando “la política de reducción de la deforestación” establecida por las Naciones Unidas y reiterada con ocasión de la próxima reunión sobre cambio climático en Paris[16].

Finalmente, la mejor prueba de que la construcción de la carretera Nuevo Edén-Shipetiari estaba afectando de manera sustancial las zonas aledañas –como lo es el Parque Nacional del Manu- ha sido el fallo dado por el Juzgado de Investigación Preparatoria en Materia Ambiental de Cuzco. Este ordenó, mediante resolución judicial el 13 de Noviembre, paralizar la construcción de la Carretera cerca del Manu. Esta decisión se hizo tomando en cuenta que la construcción de la carretera carece de la Opinión Técnica Previa Vinculante del SERNANP y del Instrumento de Gestión Ambiental. Dichas carencias "evidencian una irregularidad en la obra, que además presenta un grave daño y pone en peligro inminente la subsistencia de los diferentes ecosistemas y especies existentes en la reserva comunal Amarakaeri"[17] .